No es malo que tengas una idea inicial de cuál será el título antes de comenzar a escribir.
Pero tampoco te obsesiones. Igual que la trama y los personajes irán cambiando mientras le das forma, el título también variará en función de cómo vayas construyendo tu historia.
Por Amalia Sánchez
Ciudad de México, 13 de abril (Culturamas/SinEmbargo).– A veces es difícil saber cómo llamar a nuestros libros, ¿verdad?
¿Leíste Los hombres que no amaban a las mujeres, del escritor sueco Stieg Larsson? Seguro que sí.
Pues lo más curioso de este libro del escritor sueco es que su título inicial no era ese, sino Hombres que odian a las mujeres.
No hay duda de que quizá hubiera vendido aún más con ese título, pero también es muchísimo más polémico. Así que la editorial en este caso se curó en salud para no verse metida en líos legales.
Algo parecido sucedió con Matar a un ruiseñor, de Harper Lee.
La autora tituló el libro Atticus, pero sus editores consideraron que no era suficiente, que el nombre de su protagonista no vendería. Así que decidieron darle una vuelta de tuerca y creo que consiguieron un título brillante.
LA IMPORTANCIA DE UN TÍTULO QUE VENDA
Primero, al editor, al que no solo tienes que convencer con un buen texto sino también con un buen título.
Después, a tus lectores, los que te van a comprar.
Es lo primero que tu lector ve, percibe, y aunque no es definitivo para animarle a la compra, no hay duda de que sí influirá en su decisión.
El título es la carta de presentación de tu obra, no lo olvides.
Cuidado, con esto no quiero decir que mientas, o que generes falsas expectativas en el lector. El título tiene que ser real, pero al mismo tiempo impactante, que llame la atención de tu lector en el estante de la librería.
Recuerda que será complicado que se fijen en ti si no eres un escritor de renombre, así que tienes que trabajarte el título.
CÓMO ELEGIR
Como te decía, con estos seis pequeños consejos que te muestro a continuación conseguirás que titular tu libro sea más sencillo de ahora en adelante.
1- Escribe el título cuando hayas terminado el libro.
No es malo que tengas una idea inicial de cuál será el título antes de comenzar a escribir.
Pero tampoco te obsesiones. Igual que la trama y los personajes irán cambiando mientras le das forma, el título también variará en función de cómo vayas construyendo tu historia.
Ya sé lo que me vas a preguntar: ¿Y si tengo un título que me parece perfecto antes de escribir el libro?
Vale, lo acepto, pero en ese caso no lo pierdas como referente a la hora de ir escribiendo.
No debes mentir con el título para tratar de que te lean, tu lector debe abrir el libro y no sentirse defraudado al haberle generado unas falsas expectativas.
2- Al hilo de todo esto, cuando hayas terminado de escribir el libro, revísalo de nuevo con atención y destaca aquellos párrafos que te parezcan más llamativos.
Quizá en uno de ellos encuentres la frase mágica que te sirva para ponerle el título a tu obra.
¿Tu libro aborda un tema actual? Úsalo.
3- ¿Tu libro trata sobre un tema potente o que esté de actualidad?
Pues aprovéchalo para el título. Esta es otra de las 6 ideas para elegir un buen título para tu libro.
Por ejemplo, si tu obra es una novela que aborda el tema de la corrupción en Madrid, ¿por qué no Corrupción en la Puerta del Sol? Puede servirte como ejemplo para lo que quiero contarte.
¿Tu libro da respuestas a las preguntas de tus lectores?
4- Si tu libro da respuesta a las preguntas de los lectores, quizá ahí está la solución para el título.
Por ejemplo, imagina que escribes autoayuda. Podrías titular “10 formas prácticas de ayudarte a superar el estrés”. O “100 dietas para ayudarte a perder peso de forma definitiva”. ¿Quién no ha querido rebajar una talla y no volver a recuperarla? Con esos títulos respondes a una duda de tu lector y titulas de una forma llamativa.
5- No te olvides de recurrir al brainstorming o lluvia de ideas.
Apunta todos los títulos, palabras, imágenes que se te ocurran. Elige aquellas que mejor definen o se adecuan a tu libro.
NO OLVIDAR SUBTÍTULOS
6- Por supuesto, puedes emplear subtítulos que refuercen tu título.
Eso sí, no deben superar nunca las 10 palabras.
Aunque me he dedicado al periodismo escrito bastantes años y todos los días escribía titulares, recuerdo lo dificil que fue ponerle título a uno de mis libros.
El libro hablaba de los distintos lugares de poder que se encuentran en la provincia de Salamanca. Batuecas, Peña de Francia, Pozo de los Humos… Eran tantos que no podía elegir uno para titular el libro.
Así que lo que hice en este caso fue titular “Lugares de poder. Una ruta por los lugares de trascendencia para el hombre”. De este modo sabía que el lector iba a saber cuál era el tema central del libro.
Le daba información para hacer excursiones diferentes y con cierto toque espiritual por la provincia charra.
¿Y cómo acabó la historia?
No sé si fue el título, lo que el libro abordaba o la portada, pero agoté la primera edición. Aún hoy me lo siguen pidiendo.
